viernes, 15 de octubre de 2010

ACERCA DE MI / Viaje por Europa

Salimos de Barceloan a primera hora de la mañana con el fin de llegar lo más pronto posible a nuestro próximo destino que sería Suiza. Llegamos a Ginebra a primera hora de la tarde, después de haber comido en la carretera.Nos encontramos con una ciudad impecable, muynorganizada, llena de bancos y relojerías. Limpísima y muy cuidada, pero se notaba que era una ciudad de negocios. Recorrimos un largo trecho alrededor del Lago Leman y paramos para hacernos fotografías junto a un reloj de flores que había en la acera del paseo. Era precioso porque como he dicho anteriormente todo estaba muy cuidado. Dimos una vuelta para conocer más la ciudad y volvimos a coger la carretera hasta llegar a Berna.
Esta ciudad me encantó; es una ciudad más clásica con muchas flores por todos sitios, impoluta, ordenada , pequeña que la podías recorrer a pie en un día, silenciosa, muy bonita. A mi me encantó. Visitamos la ciudad, las calles peatonales, por algunas circulaba el tranvia  largo, largo y cómo no, silencioso. Fuimos al foso del Oso que es un emblema de la ciudad y a comprar chocolate. Yo compré ni se sabe, porque es mi debilidad. Con la excusa de que era para mis hijas compré de todos los gustos y sabores. Estuvimos buscando la calle donde vivía un exiliado español amigo de mi padre: Andrés Saborit. Republicano del partido socialista y que se había estado carteando con él. Fué más por curiosidad ya que hacía varios años que había fallecido a su regreso a España, pero en varias ocasiones nos había mandado desde Suiza varias tabletas de chocolate y fué más bien una especie de homenaje que interiormente yo le hacía a pesar de que no le había conocido, pero mi padre le apreciaba mucho. No supimos dar con la casa, porque eso sí tuvimos la mala suerte de dar con, quizás los únicos suizos antipáticos de todo el país y no supieron o no quisieron darnos orientación.Pero bueno, eso pasa hasta en las mejores familias. Una vez visita la ciudad nos dirigimos al hotel a descansar pues a pesar de ser pequeña como no la conoces empiezas a dar vueltas y vas a parar siempre al mismo sitio.
A la mañana siguiente muy temprano volvimos a la carretera pero esta vez fuuimos entre montañas goxzando de un paisaje incomparable. Desde lo alto de la montaña divisabas a los pueblecitos en el valle, pueblos de cuento, pequeños, pero muy cuidados y precioso entre el verdor del campo: las vacas pastando y muchas flores. Todo el camino lo hicimos subiendo y bajando por la montaña, pero fué increible de bonito. Nuestro destino siguiente fué Bruselas. Llegamos ya bien entrada la tarde y al llegar al hotel después de registrarnos fué inmediatamente ir a cenar, porque tienen fijada una hora y como llegues no te dan de cenar ni tampoco puedes tomar algo en la calle. Quizás es que aquí estamos mal acostumbrados y puedes comer "algo" a la hora que desees..
El hotel estaba muy céntrico, cerca de la Gran Place y de la sede central de la Comisión Europea. Fuimos andando , paseando por las calles solitarias y eso que es el centro de la ciudad, y cosa rara no llovía; hacía una noche espléndida. Llegamos a la Gran Place y verdaderamente es magnífica, se respira historia, totalmente distinta a la Plaza Mayor de Madrid, pero ambas en realidad tienen el mismo empleo: reunión de las gentes. Había mucísimos turistas y creo recordar que el guia nos dijo que las casas estaban seleccionadas según los gremios de trabajo. En todas las ciudades europeas se respira tradición e historia, y a mi me encanta pues soy apasionada de la historia de cualquier país.. Enn vista de que ya era tarde y nuestro paseo nos había alejado bastante del hotel, o eso nos parecía, retornamos para descansar pues estábamos en pie desde las seis de la mañana y agotados de tanto coche.Dormimos como "angelitos" a pesar de extrañar la cama, pero el cansancio nos pudo. Al día siguiente en una excursión contratada nos llevaron a conocer Bruselas; una ciudad grande, monumental pero como estaba nublado me pareció algo triste, pero muy bonita, Nos llevaron , cómo no, a conocer la catedral donde se casaron Balduino y Fabiola, el Ayubntamiento, de nuevo la Gran Place. Nos llevaron a ver el Atomium, emblema y resto de la exposición universal que no recuerdo en que año se celebro. Y en el parque donde está ese emblema, recuerdo que había un pabellón de China que era una maravilla; su estilo era una especie de pagoda y era uno de los pcos pabellones que aún quedaban en pie. Estaban situados en un parque enorme. Me sorprendió el Atomium: no me lo esperaba tan grande. Acostumbrada a verlo por la televisión me parecía bastante más pequeño. Algo así me ocurrió con la Torre Eifel. Después de vuelta a la capital, cómo no, fuimos buscando el Menequen Pis; el guia nos advirtió que fuéramos con cuidado porque si no ibamos atentos pasaríamos de largo sin verlo. ¡ Es minúculo! y está situado como en un chafán de una casa. Enfrente había una bombonería. Todo bombones y chocolate, Dios mio mi paraiso. Compramos bombones, Lady Godiva, claro para comer durante el viaje, para mis hijas y para regalar a los compañeros de trabajo. Eran riquísimos y lo que ma´s me extraño es que eran todos de dos tipos de chocolate, uno más oscuro que el otro y tenían forma de caracolas, y también la forma clásica. Bueno a mi la forma me daba igual. Me los tuvo que quitar Pablo por temor a que me sentaran mal. Después de estar toda la mañana visitando la ciudad nos llevaban a  tiendas donde vendían los famosos encajes, mantillas y tapices . Todo precios y carísimo, claro lo bueno hay que pagarlo. Yo compré algunos caminos de mesa y pañitos, que me gustan mucho. Ni mantilla ni tapices compramos porque además de que eran muy caros, en mantillas a nosotros no nos dan envidia y tapices pues para el tipo de casa que tenemos no le pegaba. Así que con mis bombones y mis pañitos yo iba tan contenta. Y ya era media tarde, así que el grupo de españoles que ibamos nos reunimos para cenar a las siete. Una hora en la que aquí tomamos la merienda, pero hay un refrán castellano que dice : a donde fueres, haz lo que vieres. Y así lo hicimos. Al día siguiente iriamos a Brujas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario